En su discurso en el acto de Reconocimiento a Instituciones Eclesiales durante la Dictadura, el Presidente se refirió al debate que existe en torno a la ley Naín-Retamal.
El mandatario asistió al encuentro de Reconocimiento a las instituciones eclesiales durante la Dictadura en la comuna de San Joaquín, donde expresó que este año que se conmemoran los 50 años del Golpe Militar, el gobierno quiere instalar tres grandes conceptos “memoria, democracia y futuro”.
En esta instancia aprovechó de recalcar que “seguridad, justicia y derechos humanos van siempre de la mano, nunca separados”, refiriéndose al debate que se ha dado esta semana con la Ley Nain-Retamal, donde el Gobierno propondrá algunas indicaciones para la discusión en el senado.
El encuentro realizado en la comuna de San Joaquín se premió a varios dirigentes, y destacados personeros de las distintas instituciones religiosas que ayudaron a las personas perseguidas en dictadura. El mandatario les agradeció por su contribución. “Agredecerles por habérsela jugado hasta la vida para proteger a quienes en ese momento estaban siendo perseguidos por sus ideas, por querer un mundo distinto, por luchar por la justicia” expresó el Mandatario.
“La memoria moviliza y nos invita a entender quiénes somos… que nos permite crear un futuro más respetuoso con la vida y la dignidad humana frente a la cultura individualista, en donde prima el consumo por sobre la solidaridad”, señaló Boric y aprovechó de enfatizar que para “aprender de nuestros errores, nosotros no olvidamos, ni olvidaremos”.
Gabriel Boric, además reiteró que desde el Ministerio de Justicia y de la subsecretaría de DHH se está trabajando en un plan de búsqueda de los detenidos desaparecidos, “mientras estemos aquí tenemos el deber de seguir buscando”, recalcó el Presidente insistiendo que es una “búsqueda moral”.
“El pasado no se puede borrar, como les gustaría a algunos, pero se puede aprender de él”, señaló el Mandatario.
Boric comentó que “soy optimista respecto a el futuro de Chile (…) Creo con mucha esperanza un futuro digno para Chile, pero recalcó que los DDHH cada generación tiene el deber de aprenderlos y por eso quienes dicen que hay que dar vuelta la página, que no estabas vivo para ese momento (…) de ese pasado queremos aprender para que nunca más en Chile se violen los DDHH como se hizo en el pasado”.
El mandatario finalizó su discurso asegurando que “resulta inexplicable que se quiera conseguir seguridad sin respetar los derechos humanos”.