Jenny del Carmen Barra Rosales, Estudiante de Enfermería de la Universidad Católica, militante del MIR, fue detenida por primera vez el 17 de enero de 1974, a los 20 años de edad, por Militares de la Escuela de Infantería de San Bernardo. En esa oportunidad permaneció por espacio aproximado de 6 meses recluida en Cerro Chena, recinto de Tejas Verdes, Casa Correccional y Campamento Tres Alamos en virtud de las normas por Estado de Sitio.

En esa oportunidad se le acusaba de repartir panfletos y pertenecer al Frente de Estudiantes Revolucionarios (FER).
Una vez recuperada su libertad, continuó con sus estudios en la carrera de Enfermería de la U. Católica de Santiago. El 17 de octubre de 1977, informó a terceras personas haber sido seguida desde Santiago, pero no le dio importancia. Se le vio en un automóvil marca Peugeot 404 color gris, patente CH-800 de Renca, solicitada a la Municipalidad por la ex-DINA (la DINA había sido disuelta en agosto de 1977 creándose como su reemplazo la Central Nacional de Informaciones o “CNI”). Dicho auto pertenecía al Ministerio de Defensa.
Posteriormente fue trasladada a un centro de tortura, según testigos junto a su amigo militante del PS y fotógrafo, Hernán Santos Pérez Álvarez, donde ambos desaparecieron. El 4 de noviembre de 1977, su madre Laurisa Rosales interpuso un Recurso de Amparo, ante lo cual se solicitan antecedentes al Ministerio del Interior e Investigaciones, quienes señalaron que solo hay antecedentes de la primera detención por lo que se rechazó este Recurso y se abrió un sumario.
Laurisa denunció secuestro y el caso se sobreseyó considerando supuesta prescripción, pero como no se había hecho la investigación completa se volvió a abrir sumario, el cual se sobreseyó temporalmente en 1980. Sus restos fueron encontrados en 2001 en una mina abandonada en la Cuesta Barriga, una carretera alternativa que une Santiago y Valparaíso (120 km. al Oeste de la capital).
En la antigua mina se hallaron 200 pequeñas osamentas, rastros de los cuerpos que en 1979 los agentes de la dictadura desenterraron y nuevamente hicieron desaparecer para eliminar las huellas del paradero de los fallecidos, en una operación conocida como “Traslado de televisores”, según el comunicado del gobierno. Jenny Barra es la primera mujer desaparecida en Chile cuyos restos han sido identificados gracias al trabajo multidisciplinario del SML.
En este caso también hubo colaboración de parte de un laboratorio austriaco que contribuyó con los análisis genéticos. En la Plaza Guarello de San Bernardo hay un memorial por las víctimas de la dictadura que lleva el nombre de Jenny Barra.

En octubre de 2012 se pudo notificar a su familia de la identidad confirmada de los restos de Jenny, los cuales fueron enterrados en noviembre del mismo año.
En 2013 recibió su título póstumo de Enfermera por parte de la Pontificia Universidad Católica de Chile.
A finales del 2018 se inauguró una placa conmemorativa en honor a ella y se le dió el nombre de Sala Jenny Barra a la sala del Centro de Estudiantes de Enfermería de la Universidad Católica
“Justicia para Jenny Barra”
Este viernes 7 de febrero del 2025. La Tercera Sala de la Corte de Apelaciones de San Miguel dictó sentencia de segunda instancia en la causa que investiga la detención y homicidio de Jenny Barra Rosales, estudiante de enfermería de la Universidad Católica y militante del Movimiento de Izquierda Revolucionaria, MIR, cometido a partir del 17 de octubre de 1977.