El ministro de Hacienda recordó que en esta materia exista una sola experiencia en el mundo que es el de la Unión Europea y que se dio luego de un extenso proceso de integración que concluyó con un solo Banco Central y una sola política monetaria.
Con cautela reaccionó el ministro de Hacienda Mario Marcel ante el anuncio de los gobiernos de Brasil y Argentina de aplicar una moneda única que busca establecerse primero como un mecanismo de intercambio bilateral para luego extenderse al resto de Sudamérica.
“Es una experiencia que primero nos preocuparemos de entender su alcance, su contenido”, sostuvo el secretario de Estado ante las consultas de los periodistas sobre el tema que se tomó parte de la conferencia que realizaron de manera conjunta en la Casa Rosada, en Buenos Aires, los presidentes Luis Inacio Lula da Silva de Brasil y su par argentino Alberto Fernández.
“Si uno analiza lo que ha sido la experiencia, que no es demasiado abundante al respecto, que es básicamente la de los países de la Zona Euro, en la Zona Euro primero hubo integración comercial, integración aduanera, luego vino la integración monetaria que implica no solamente tener una moneda común, sino que un Banco Central común que define una política monetaria que es común a los países que utilizan esa moneda”, explicó el ministro Marcel.
El titular de Hacienda recordó que en Europa “lo que se vio en la crisis especialmente en el año 2011-2012 es que también es necesario un grado importante de coordinación de la política fiscal para lo cual en el caso de la UE se aprobaron una serie de nuevas normas para asegurar una conducción responsable y común de la política fiscal en los países europeo”.
Marcel precisó que “desconocemos en el caso que se ha mencionado en el caso de Brasil y Argentina cuánto más allá quisiera avanzarse en estas distintas materias. Como sabemos, Chile es un país observador o asociado de MERCOSUR, no forma parte de su estructura de toma de decisiones y creo que por el momento estamos cómodos teniendo una política monetaria y fiscal propia que ha sido especialmente útiles para comenzar la reducción de la inflación este año”.
Además, sostuvo que “para calificar la idea como buena o mala, uno debería tener el conjunto de los detalles de la idea”.
Sin embargo, el expresidente del Banco Central y decano de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad de Chile, José de Gregorio, adelantó que “el anuncio de la moneda única es lo más absurdo que he escuchado y poco creíble”.
En conversación con radio Infinita, dijo esperar “que el Gobierno y sus autoridades no mencionen esto porque ni siquiera vale la pena decir ‘vamos a ir a conversar’… es una pérdida de tiempo total”.
El economista se preguntó “¿se imaginan ustedes a Argentina financiando su presupuesto sin el impuesto inflación y los brasileros le van a pasar los billetes para que puedan ir a cerrar las cuentas fiscales? ¿Y Brasil arriesgando la buena política monetaria que tiene? La verdad es que no tiene ningún sentido”.
La idea que el fin de semana apareció como una posibilidad, este lunes fue refrendada por el propio Lula en su conferencia conjunta con el presidente argentino Alberto Fernández.
Al respecto, el mandatario brasileño indicó que la implementación de esta medida sería “un salto de calidad en nuestras relaciones comerciales y financieras”.
“Lo que queremos ahora es que nuestros ministros de hacienda, cada uno con sus equipos, puedan hacernos una propuesta de comercio exterior y de transacciones entre los dos países que se hagan en una moneda común que se construya después de mucho debate y después de muchas reuniones”, comentó Lula.
El jefe de Estado brasileño preguntó “¿por qué no intentar crear una moneda común con otros países del Mercosur como se intentó hacer con los países del BRICS? Creo que es necesario que suceda eso porque hay países que a veces tienen dificultades en conseguir dólares”.
Imagen de portada: Agencia Aton