En junio de este año, la Presidenta Michelle Bachelet firmó el proyecto de ley que da origen a este seguro obligatorio y de carácter solidario del que podrán gozar los padres y madres. Un avance más para seguir fortaleciendo el sistema de protección social. Hoy, finalmente, se promulga el Seguro para el Acompañamiento de niños y niñas que padezcan enfermedades graves (SANNA).
¿Para qué sirve el Proyecto de ley Sanna?
Mediante este seguro, las mamás y papás que son trabajadores podrán acompañar a sus hijos de entre 1 y 18 años que se encuentren afectados por una condición grave de salud y de alto riesgo vital, haciendo uso de una licencia médica hasta por 90, 60 o 45 días según el caso, y de esa manera, puedan acompañarlos, cuidarlos y durante ese tiempo. Recibirán una prestación económica que reemplaza, total o parcialmente, la remuneración financiada por este seguro.
Este seguro cubrirá a más de 3 millones de trabajadores, y más de 4.000 niños podrán contar con el cuidado de sus padres en momentos difíciles.
¿Qué tipo de enfermedades son consideradas por el SANNA?
Los padres podrán acompañar a sus hijos e hijas menores afectados por enfermedades catastróficas como el cáncer, trasplante, estado terminal, accidente grave con riesgo de muerte o secuela funcional severa y permanente. Cada una de estas enfermedades se irán sumando de forma gradual, partiendo por el cáncer y sus cuidados paliativos y luego se irán incorporando las demás contingencias.
- Si ambos padres son trabajadores podrán hacer uso de la licencia en conjunto o sucesivamente, por día completo o media jornada.
- Si haces uso de SANNA, no podrás ser despedido.
¿Los tiempos de licencia varían según cada enfermedad?
Sí, cada enfermedad considera tiempos que se ajustan a cada procedimiento médico.
- Cáncer y Trasplante: 90 días corridos.
- Desahucio o Estado Terminal: 60 días.
- Accidente grave, con riesgo vital, o secuela funcional severa y permanente: 45 días y desde el día 11.
¿Qué aporte a Chile hará este nuevo Seguro Obligatorio?
Con esta política pública, se busca conciliar familia y trabajo, incentiva la corresponsabilidad parental: que tanto el padre como la madre se involucren en el cuidado de sus hijos, promoviendo de este modo un cuidado más equitativo.