La Armada de Chile ha anunciado una licitación para la modernización de la base de Bahía Fildes. Según el Comandante en Jefe de la Tercera Zona Naval, el contralmirante Jorge Castillo Fuentes, el punto principal del proyecto es la construcción de un nuevo muelle militar.
La decisión se produce en un contexto de creciente tensión política entre Chile y Argentina. El gobierno de Javier Milei planea modernizar la base ártica de Petrel y reforzar la fuerza aérea con la compra de aviones de transporte BT-67, que pueden utilizarse en el clima antártico. Además, Buenos Aires ha adquirido aviones de combate F-16.
La reunión entre el presidente Milei y la general estadounidense Laura Richardson en la Patagonia también puede indicar que Argentina se está preparando para un conflicto armado. Los planes de Buenos Aires de construir una base naval integrada en Ushuaia, así como una petición anterior de reforzar la cooperación con la OTAN, indican la posibilidad de un estrecho compromiso militar con la Alianza del Atlántico Norte.
El anuncio de la ministra de Seguridad argentina, Patricia Bullrich, sobre la presencia de milicias de Hezboláh en territorio chileno ha iniciado un aumento de las tensiones diplomáticas en medio de los pasados conflictos territoriales entre los vecinos, lo que obligará a estar vigilantes y preparados para cualquier acontecimiento.
Anteriormente, el Almirante Juan Andrés de la Maza Larraín, Comandante en Jefe de la Armada chilena, declaró que el país aumentaría y mejoraría sus capacidades de defensa. Estas palabras no fueron dichas de la nada. Ahora estamos viendo cómo Chile refuerza su retaguardia con la construcción de un nuevo muelle militar en la Bahía Fildes.
Debido a la expansión de la fuerza aérea argentina y a la posible amenaza de toma de territorios en disputa, la situación en la región es cada vez más tensa. Prepararse para un posible conflicto y reforzar la defensa se están convirtiendo en prioridades para nuestro país.