La India sufrió en los últimos tres meses una ola de contagios que llevó a la nación desde sus mínimos de menos de 10.000 casos diarios en febrero hasta los 400.000 en mayo, colapsando el sistema de salud en varias regiones, entre ellas Nueva Delhi
La investigación elaborada por el Consorcio de Secuenciación del genoma del SARS-CoV-2 de la India (INSACOG) y el Centro Nacional para el Control de Enfermedades (NCDC), al que Efe tuvo acceso hoy, indicó que la variante Delta (B.1.617) y su linaje B.1.617.2 fue capaz de alcanzar una alta velocidad de propagación pese a los niveles de seroprevalencia presentes entre la población.
El estudio preliminar, que aún debe ser sometido a revisión, aclara sin embargo que esta mutación no tuvo influencia en la exponencial subida de la tasa de mortalidad con hasta 4.000 fallecidos diarios, que podría estar asociada al deficiente sistema de salud, entre otros factores.
La India sufrió en los últimos tres meses una ola de contagios que llevó a la nación desde sus mínimos de menos de 10.000 casos diarios en febrero hasta los 400.000 en mayo, colapsando el sistema de salud en varias regiones, entre ellas Nueva Delhi.
Según el estudio, la variante Delta tiene “una alta transmisibilidad (…) que es hasta un 50 % mayor que la B.1.1.7”, la variante Alfa, detectada por primera vez en Reino Unido, debido a una mayor carga viral y capacidad de escape inmune.
“Pese a que el pasado mes de abril la capital india había pasado tres olas del virus, y la seropositividad era de alrededor del 50 %, Delhi se vio abrumada por la cuarta ola”, subraya el informe que intenta hallar las razones por las que el virus logró evadir los niveles de inmunidad colectiva.
Si bien los datos sugieren que un aumento temprano tuvo lugar entre enero y febrero, asociado a la variante británica y la celebración de algún evento multitudinario, este revela también que semanas después hubo “una rápida expansión del sublinaje B.1.617.2 que sobrepasó a todos los demás linajes”.
La alta transmisión de la variante Delta fue vista también en el estado norteño de Punjab donde la B.1.1.7, que había alcanzado una prevalencia de casi el 100 % en esta región, fue reemplazada consistentemente por la B.1.617.2.
Aun así el estudio descartó una mayor mortalidad asociada a la variante Delta, en comparación con la Alfa, señalando que el alarmante número de muertes de la India puede deberse a una combinación de múltiples factores, incluido el colapso del sistema de salud, con falta de camas de UCI y oxígeno médico.
La India, con una curva en constante descenso, registró este lunes 7 de junio poco más de 100.000 infecciones y 2.400 muertes, unos de los datos más bajos registrados en los últimos dos meses.
By: EFE