Ante la presentación del informe, el presidente del Banco Central, Mario Marcel, sostuvo: «Este IPoM es, sin duda, el más difícil desde que se implementa en Chile el marco de metas de inflación. Difícil en su preparación, difícil por las dimensiones de la incertidumbre y difícil en su mensaje”.
Este jueves, el presidente del Banco Central de Chile, Mario Marcel, presentó, ante la Comisión de Hacienda del Senado, el Informe de Política Monetaria (IPoM) de diciembre de 2019.
En su intervención, Marcel destacó que “el país está atravesando por momentos complejos y la economía, como era de esperarse, los está reflejando con fuerza”.
Del mismo modo, agregó que la crisis social “ha provocado importantes disrupciones en el sistema productivo, incidiendo fuertemente en una menor actividad y debilitando el empleo”.
“Este IPoM es, sin duda, el más difícil desde que se implementa en Chile el marco de metas de inflación. Difícil en su preparación, difícil por las dimensiones de la incertidumbre y difícil en su mensaje”, sostuvo la autoridad durante su exposición.
De esta manera, Marcel señaló que la perspectiva macroeconómica aporta un grado adicional de preocupación. “La magnitud del impacto de la crisis social es comparable con algunos de los mayores shocks recibidos en el pasado por la economía chilena y amortiguar dicho impacto involucrará recurrir a gran parte de las holguras y a la experiencia acumulada por las autoridades económicas a lo largo de los años”.
En su presentación, Marcel indicó que, ante este escenario, la actividad tendrá una caída anual de 2,5% en el cuarto trimestre del año, la que se concentrará en octubre y noviembre. Mientras que diciembre debería mostrar un desempeño algo mejor, pero con una alta incertidumbre en torno a ella.
Con esto, en 2019 el PIB total acumulará un crecimiento en torno a 1%, considerablemente por debajo de lo previsto en septiembre (2,25%-2,75%). Esta proyección contempla que tanto el consumo como la inversión tendrán variaciones anuales negativas en la última parte de 2019, con una debilidad especialmente concentrada en sus componentes transables.
Respecto de ello, el presidente del Banco Central manifestó que “el mal desempeño en el último trimestre de 2019 entrega un bajo nivel de partida para la economía en 2020″.
A modo de reflexión, Marcel sostuvo que la combinación de política monetaria y fiscal que se ha ido gestando, otorga un apoyo importante para la estabilización de la economía, similar a la respuesta a la crisis financiera global de 2008-2009. “Es evidente que mientras no se resuelva la incertidumbre subyacente, los costos para la economía y, especialmente, para las personas, seguirán aumentando” dijo.
“De prolongarse una situación en la cual la economía no pueda operar en las condiciones adecuadas, podemos vernos enfrentados a un escenario en que el empleo, el ingreso y la calidad de vida de las personas se vea aún más afectada”, añadió el economista.