La bancada de diputados de Renovación Nacional, encabezada por Frank Sauerbaum y Marcia Raphael, anunció que tras la reunión habitual sostenida durante el almuerzo, los parlamentarios acordaron rechazar el veto presidencial a la Ley de Usurpaciones que mañana se votará en la Sala de la Cámara.
En la reunión intervinieron los diputados Camila Flores, Diego Schalper, Andrés Longton, Jorge Rathgeb, Juan Juan Carlos Beltrán y José Miguel Castro, entre otros.
Tras el encuentro, el jefe de bancada, Frank Sauerbaum, argumentó que “el Gobierno ingresó un veto que tiene por objeto sancionar toda conducta de usurpación con multa y desalentar a las policías a tomar detenidos”.
“La forma del veto y la intención de legislar a través del mismo es inaceptable y pone en entredicho las credenciales democráticas del Presidente Boric que por secretaría está buscando la impunidad”, declaró.
Asimismo, el parlamentario sostuvo que desde RN no pueden “aceptar este precedente, que transmite la idea al Gobierno que si aprobamos algo que le incomode al Partido Comunista y Apruebo Dignidad, puede vetar y atropellar la voluntad del Congreso Nacional”.
Mientras, el diputado y presidente de la Comisión de Seguridad, Andrés Longton explicó que “lamentablemente el veto del Gobierno se extiende más allá de lo que en un comienzo la misma ministra señaló, alterando el corazón del proyecto y transgrediendo la voluntad del congreso de manera abusiva”.
En esa misma línea, agregó que el veto “si sale como está, va a dar la apariencia de que está generando un cambio en favor de quienes tienen sus terrenos usurpados”. “Pero la verdad es que todo va a seguir más o menos igual, con impedimentos para las policías para que puedan detener a las personas y persistiendo en las penas de multas”, dijo.
Longton indicó que su sector impulsó un “proyecto que establecía sanciones claras y le daba las herramientas suficientes a las policías para poder combatir este grave delito que tiene a muchas familias a lo largo de todo Chile viviendo una injusticia permanente, además de la angustia de largos procesos judiciales que nunca llegan a buen término. Y lamentablemente el veto va en el sentido contrario”.
