El diputado por Los Ríos, Bernardo Berger (RN), llamó al Ministerio de Obras públicas a que clarifique el futuro de la obra vial que uniría a los sectores de Bocatoma y Coñaripe en Panguipulli en los últimos 11,2 kilómetros, luego de la preocupación de vecinos, ya que los trabajos se encontrarían visiblemente abandonados. El parlamentario recordó que a nivel nacional la empresa a cargo de los trabajos; Ingeproc SPA, que reconoció problemas económicos y a mantenido problemas en varias ciudades del país, y con ello incertidumbre respecto del futuro tanto de los trabajadores como de las obras, especialmente en Panguipulli que tenían fecha de término para junio del presente año, donde la inversión en juego supera los 7 mil millones de pesos.
Berger además indicó que “en terreno difícilmente se ve un 85% de avance como ha dicho la cartera de Obras Públicas en la Región de los Ríos, además qué pasa con los pagos a los trabajadores, y a quienes prestaban servicios a la empresa como las pensiones u otros servicios. Aquí hay una inmensa incertidumbre, los vecinos no pueden seguir así”.
«Debemos garantizar a la comunidad que el Gobierno cumplirá con este anhelado proyecto. No sólo porque significa una mejora sustentable en la calidad de vida de quienes habitan en ese sector, sino por el efecto positivo en el turismo y porque en muchos discursos esta ruta era caballito de batalla y ahora no sabemos qué va a pasar con las obras» acotó. El diputado también mostró preocupación por la falta de señalética en la ruta, ya que sería especialmente en las noches donde los automovilistas correrían riesgo al no notarse los sectores ya pavimentados y los que aún están en proceso de ser asfaltados, lo que también preocupa a vecinos de la zona por el eventual riesgo de accidentes de tránsito.
Por último, el legislador también pidió al Consejo de Monumentos Nacionales acelere los protocolos para que entregue a la empresa el espacio en dónde se hallaron utensilios mapuche a finales de mayo de 2015, tramo que quedaría sin intervenir debido a la demora del proceso de investigación arqueológica, sin que exista un plazo fijo para finalizar las investigaciones.