Este domingo son las elecciones en el país vecino. Pese a haber 18 candidatos en la papeleta, más de un 30 por ciento de los peruanos llamados a votar dicen no tener candidato, por lo que se espera un alto nivel de abstención acentuado, además, por la crisis del coronavirus que en el país vecino suma más de 1,6 millones de contagiados y más de 50 mil muertos.
El pueblo peruano ya no confía en los partidos ni en la clase política local. Esta es una conclusión a la que llega casi la totalidad de los analistas cuando se refieren a las elecciones presidenciales y legislativas del venidero domingo 11 de abril.
Nada menos que 18 candidatos son los que lucharán por el sillón presidencial y, según las encuestas, ninguno de ellos marca más de un 12 por ciento en intención de voto. Una crisis de representatividad que, a esta altura, ni los propios partidos políticos peruanos la niegan.
Y la crisis es tal que, pese a haber 18 candidatos en la papeleta, más de un 30 por ciento de los peruanos llamados a votar dicen no tener candidato, por lo que se espera un alto nivel de ausentismo acentuado, además, por la crisis del coronavirus que en el país vecino suma más de 1,6 millones de contagiados y más de 50 mil muertos.
En conversación con Radio y Diario Universidad de Chile, la académica del Instituto de Estudios Internacionales de la Universidad de Chile, Paz Milet, enfatizó en la crisis política que vive la nación incaica, indicando que se necesita hacer un cambio drástico al sistema democrático local si lo que se busca es dar estabilidad política al país, sobre todo en los tiempos actuales, donde la pandemia azota con fuerza a un Perú pobre e incrédulo.
“La forma en que se desarrolla la política en Perú, la erosión que se ha vivido durante el último tiempo en el sistema democrático indica que se necesita hacer un cambio profundo, de lo contrario, no hay posibilidad de generar estabilidad, continuidad política para poder enfrentar una crisis muy profunda como lo es la pandemia, que ha involucrado a todos los sectores de Perú. No podemos olvidar que estamos con un Perú en que más del 50 por ciento de la población vive en la informalidad, y más del 30 por ciento del sector pobre no tiene, siquiera, refrigerador, y necesita salir a comprar su comida. Este es el Perú de hoy en día, el Perú del Bicentenario, por lo que se requieren cambios profundos y, por supuesto, una clase política que responda a esos requerimientos”.
Este último punto es importante, pues la crisis política de Perú ha llegado a sus actuales niveles, sobre todo, por la corrupción sin tapujos por parte de los dirigentes políticos y autoridades estatales.
No se salvan los sucesivos presidentes que en los últimos años ha tenido Perú, ni tampoco los legisladores que han aportado sustantivamente a la inestabilidad política.
Más allá de la corrupción, el Congreso ha tenido un papel determinante en el devenir político de Perú, destituyendo a más de un presidente y obstaculizando a los gobiernos de turno. Y es que en un país tan fragmentado como la nación andina, el Legislativo no hace más que reflejar dicha realidad, entrampándose en rivalidades políticas que no dejan avanzar ni leyes ni reformas.
Independientemente de quién gane esta elección presidencial, tendrá el mismo problema que han tenido los mandatarios durante la última década: el Congreso, por lo que será un verdadero desafío para quien tome las riendas de la nación. Así lo sostuvo a nuestro medio el analista internacional Guillermo Holzmann.
“Independiente de quien llegue a ser Presidente de Perú, lo que ya está consignado es que el Parlamento peruano va a quedar altamente fraccionado; será un Parlamento en que, al menos, va a tener entre 12 y 16 bancadas distintas, por lo tanto, el próximo Presidente va a tener una dificultad enorme para poder conseguir las mayorías, generar una negociación y no desdibujar su programa de gobierno, es decir, estará sometido a un desafío permanente de mantener la estabilidad democrática del Perú”.
De todas maneras, el experto ve crisis de democracia no solo en el país vecino, sino que reconoce que es un problema que, actualmente, enfrenta Latinoamérica. Basta recordar la primera vuelta de la elección en Ecuador -donde este fin de semana se resuelve el balotaje-, en la que participaron nada menos que 16 candidatos a la Presidencia.
Ante esto, y frente las crisis de representatividad en países de la zona, Guillermo Holzmann sindica a la lógica de los partidos como una de las responsables, en donde las colectividades políticas se habrían quedado atrapadas en el siglo pasado.
“Yo creo que, en América Latina, el debilitamiento de los procesos democráticos marcados por la fragmentación ideológica de los partidos que no logran zafarse del siglo XX y siguen en sus dinámicas de izquierda o derecha tradicional camufladas en nuevas perspectivas y muy basadas en liderazgos personalistas, claramente coopera en esta fragmentación, que normalmente va acompañada por un sistema electoral que permite, e incluso, incentiva la fragmentación política”.
Quien también se refirió a la situación que hoy enfrenta Perú fue el analista internacional Mladen Yopo. Contactado por nuestro medio, el doctor en Ciencia Política explicó que, en la nación vecina, la crisis de representación está empujando a un sistema de protopartidos, que se visualiza en la creación de distintos movimientos y organizaciones que buscan demandas propias y, generalmente, sin una propuesta política.
“Yo creo que, en el caso de Perú, se está dando una fragmentación de partidos y está volviéndose a un sistema que se llama de protopartidos, que no son partidos propiamente tales, sino que son casi formaciones, agrupaciones o movimientos. Encontramos, en esta elección presidencial, una variedad de partidos y si uno se va a regiones, eso se multiplica por dos o por tres, entonces, comienzan a haber movimientos caudillistas, entonces, al final, los grandes partidos ideológicos, los grandes partidos que tenían una propuesta de sistema, hay más bien han desaparecido”.
Además, al igual que Holzmann, Yopo coincidió en que la crisis política que afecta a Perú afecta también a gran parte de Latinoamérica, Chile incluido, donde los precandidatos a la Presidencia suman más de 15 y ninguno logra sobrepasar los diez puntos en las encuestas.
Para el analista, las democracias construidas en gran parte de Sudamérica están fracasadas, por lo cual, tanto los partidos como las instituciones están totalmente deslegitimadas por la ciudadanía.
“Yo tengo la impresión de que son democracias fracasadas, democracias que, de alguna forma, albergaron el famoso Consenso de Washington, y aquellas más progresistas lo que se llamó la tercera vía, pero perdieron todo el sentido de un Estado de bienestar, de un Estado que, de alguna forma, pretendía generar un piso básico de seguridad y generar cierta justicia en lo que es el Contrato Social y, por tanto, perdieron esa esencia. Ante esto, lo que estamos encontrando hoy es un malestar social muy grande, una deslegitimación de las instituciones y del sistema de partidos”.
Esta crisis hoy es evidente en Perú. Presidentes destituidos, políticos con procesos judiciales abiertos, poca participación ciudadana, mal manejo de la pandemia y un futuro incierto es la puesta en escena con la que se recibirá el Bicentenario en la nación vecina. Doscientos años de independencia que, a la vista está, no ha sido lo que los peruanos esperaban. La única certeza hoy, es que habrá segunda vuelta en la elección presidencial.
By: Camilo Villa J / Diario Uchile