Para la integrante de la Red Chilena contra la Violencia hacia las Mujeres, Yoselin Fernández, un paquete de medidas económicas debería acompañar el reforzamiento de las líneas telefónicas de denuncia
Un 70 por ciento de incremento en las llamadas de denuncias por violencia intrafamiliar solo en la primera semana de cuarentena, es la cifra que entregó públicamente el Ministerio de la Mujer, y que confirmó aquello que diversas organizaciones sociales, además de las Naciones Unidas, habían advertido.
Para dar detalles de este incremento y trabajar en propuestas para su reducción en el contexto de la pandemia, el último jueves, la Comisión de la Mujer y la Igualdad de Género del Senado, invitó a la titular de la cartera, Carolina Cuevas, quien indicó que, según cifras a nivel regional, diversos países muestran una reducción en el nivel de denuncias.
No obstante, para Cuevas, dichas cifras deberían ser analizadas con cuidado.
“Es un momento muy especial donde el comportamiento de las mujeres afectadas por violencia también es errático. Por razones de la cuarentena, no tienen la libertad para hacer una denuncia, tenemos que considerar que los agresores son controladores y en estos momentos pueden dejarlas aún más aisladas. Entonces, puede haber muchas cifras ocultas”, explicó Cuevas.
En concreto, respecto del nivel de denuncias registradas por Carabineros de Chile, durante marzo efectivamente existió una disminución de 7.937 a 7.035 a comparación de marzo de 2019. Muy por el contrario, en el caso de las denuncias a través de la línea 149 el aumento representa un 20 por ciento en comparación también con el mismo mes del año pasado.
Esto mismo, ha llevado, por ejemplo, a iniciativas como la defendida por la senadora y presidenta de la Comisión de la Mujer y la Igualdad de Género, Adriana Muñoz, quien se refirió a la necesidad de potenciar el seguimiento de las denuncias de forma telefónica y digital para evitar el aumento de casos de violencia.
“Es muy importante que nos anticipemos para proteger a mujeres, niñas, niños, ancianos, que producto de la cuarentena pueden estar sufriendo violencia al interior de sus hogares. Según datos del Ministerio de la Mujer, han aumentado las llamadas telefónicas denunciando violencia intrafamiliar, por eso que hay que impulsar ahora el sistema del seguimiento telemático de las medidas preventivas cautelares y establecer un sistema de protección en la pandemia”, precisó.
Pero el problema de la violencia, para algunas organizaciones, no termina aquí. En el caso de la Red Chilena contra la Violencia hacia las Mujeres, aunque valoran iniciativas como la inclusión del delito de violencia intrafamiliar en el recientemente aprobado proyecto de indultos conmutativos, aseguran que la crisis sanitaria expone también otros tipos de violencia, que es necesario erradicar.
“Históricamente, las encargadas de abastecer los hogares y hacerse cargo de todas las tareas destinadas al sostenimiento de la vida -que haya alimento, que la casa esté limpia, que los niños vayan al colegio, que los maridos tengan ropa limpia para trabajar- siempre ha sido un rol asignado a las mujeres. Eso también implica una carga laboral que es absolutamente violenta y desigual”, explicó a nuestro medio una de sus integrantes, Yoselin Fernández.
Asimismo, la activista se refirió a las iniciativas que existen dentro del mundo político para hacer frente a este problema, pero insistió en la necesidad de atacar el problema de forma completa y porque no a través de una agenda de género en el contexto de la pandemia.
“Tenemos serias dudas de lo que se está haciendo para reforzar la institucionalidad débil que existe. Hemos sabido que las medidas paliativas tomadas por el ministerio se reducen al reforzamiento de la línea 1455. Nos parece que eso es absolutamente insuficiente porque es un teléfono de orientación, que nos muestra una sola dimensión del problema, la violencia intrafamiliar, pero no vemos que se estén tomando medidas económicas”, criticó.
En comparación con iniciativas manejadas a nivel sudamericano, respecto de la violencia intrafamiliar, Fernández explicó que en el caso argentino se ha incluido a estos episodios como parte de las excepciones para romper la cuarentena.
En el caso de Chile, se sabe que el Ministerio Público viene trabajando en la implementación de canales digitales para realizar el seguimiento a denuncias de este tipo. Además, el Instituto Nacional de Derechos Humanos también ha abierto su plataforma web para la recepción de denuncias, enfatizando que, las medidas interpuestas por el Estado ante la crisis no impactan de igual forma en todas las personas, dejando así en situación de vulnerabilidad tanto a las mujeres, como a los niños, niñas y adolescentes.
By: Eduardo Andrade / Diario Uchile